El hórreo es una construcción muy típica en Asturias destinada a guardar y conservar los alimentos, alejados de la humedad y de los animales. Se suelen guardar el grano, las frutas y hortalizas, la matanza y aperos agrícolas, además bajo él se suelen encontrar también el carro, el arado o la leña recogida para el invierno.

Se caracteriza por mantenerse levantado sobre pilares para evitar la entrada de humedad y de animales (especialmente ratones y otros roedores) desde el suelo y por permitir la ventilación a través de ranuras en las paredes perimétricas.